Airbag puso el broche de oro al año más importante de su carrera con dos noches demoledoras en el Estadio Monumental. El miércoles 17 y el jueves 18 de diciembre, el trío integrado por Patricio, Guido y Gastón Sardelli volvió a agotar River Plate y alcanzó una marca inédita: cinco estadios Monumental llenos en un mismo año, un récord que los ubica en la cima de la convocatoria del rock argentino actual.

El cierre de 2025 fue la culminación de un recorrido imparable. Tras agotar cuatro fechas en tiempo récord, la banda sumó una quinta función y transformó su clásico show de fin de año en un ritual multitudinario. Más de 170 mil personas pasaron por el estadio en dos noches que ya se inscriben entre los grandes hitos del rock nacional reciente.

Desde el primer acorde, el Monumental entró en combustión. El pogo no dio respiro: banderas en alto, gargantas encendidas y un campo que se movió como un solo cuerpo durante todo el concierto. Sin pausas ni tiempos muertos, Airbag ofreció rock de estadio en estado puro, sostenido por un sonido potente y una puesta en escena a la altura de los grandes shows internacionales.

El show comenzó pasadas las 21 y se extendió hasta después de la medianoche. Más de tres horas y más de 30 canciones construyeron una noche intensa, con la pasarela como elemento clave para reforzar la cercanía con el público y profundizar esa comunión que se volvió una de las marcas registradas del grupo.

Uno de los momentos más esperados fue el estreno en vivo de “Blues del Infierno”, segundo adelanto de El Club de la Pelea II, lanzado apenas horas antes del recital. Oscura, eléctrica y cargada de tensión, la canción mostró una nueva faceta sonora de Airbag, con guitarras protagonistas y una interpretación que juega entre el deseo y el peligro. El Monumental la recibió como un clásico instantáneo, confirmando el vínculo inquebrantable entre la banda y su gente.

Tras “Apocalipsis”, Patricio Sardelli resumió ese lazo con una frase contundente: “Este es el mejor público del mundo”. Más tarde, antes de “Diez días”, volvió a tomar el micrófono para brindar por la noche y por lo que vendrá, en una arenga que desató una ovación ensordecedora y terminó de encender el estadio.

El show también tuvo momentos de humor y teatralidad, como el pasaje de “Frankenstein”, y otros de profunda emoción, como antes de “Nunca lo olvides”, cuando el Monumental entero se abrazó y cantó al unísono. Hubo espacio para guiños inesperados, con fragmentos de “Volver” de Carlos Gardel y “Is This Love” de Bob Marley, integrados con naturalidad al universo de la banda.

El setlist recorrió toda su discografía y mantuvo la intensidad de principio a fin con temas como “Jinetes Cromados”, “Anarquía”, “Huracán”, “Cuchillos”, “Bajos Instintos”, “Por mil noches” y “Mi sensación”. El punto más salvaje llegó con “Colombiana”, cuando el campo explotó en un pogo masivo que dejó una postal cruda y visceral, fiel al espíritu del rock and roll.

Con cinco River agotados, una gira internacional de más de 30 shows en más de 20 ciudades y un nuevo disco en camino, Airbag cerró 2025 en su punto más alto. Lejos de ser un techo, el Monumental volvió a funcionar como plataforma para una banda que sigue empujando sus propios límites.