En una ceremonia histórica realizada el 6 de diciembre en el Despacho Oval, los miembros de Kiss fueron distinguidos con las medallas de honor del Kennedy Center, entregadas por el presidente estadounidense Donald Trump. Gene Simmons, Paul Stanley y Peter Criss estuvieron presentes, mientras que Monique Frehley, hija del fallecido Ace Frehley, recibió la distinción en nombre del legendario guitarrista.

Trump calificó a Kiss como “una banda de rock increíble” y destacó la trayectoria del grupo dentro de la cultura popular estadounidense. También recordó a Ace Frehley, quien murió meses antes: “Descansa en paz, pero su hermosa hija está aquí para recibir este premio”, expresó.

El reconocimiento llegó junto a una camada de homenajeados que el propio Trump describió como “quizás la clase más destacada y renombrada que se haya reunido jamás”. Entre ellos estuvieron Sylvester Stallone, Gloria Gaynor, George Strait y Michael Crawford.

Ace Frehley se convirtió así en la tercera persona en recibir un premio del Kennedy Center de forma póstuma, siguiendo los pasos de Glenn Frey (Eagles) y Phil Lesh (Grateful Dead). Cuando se anunció la distinción en agosto, Frehley había definido el reconocimiento como “un sueño hecho realidad”, aunque no llegó a vivirlo en primera persona.

La ceremonia marca un nuevo capítulo en la historia de Kiss, un grupo que trascendió su maquillaje, su estética teatral y sus shows monumentales para convertirse en una institución del rock mundial.