«Verde paisaje del infierno», el quinto disco de estudio de Los Piojos está cumpliendo 20 años este 27 de octubre. Un disco que fue grabado en los estudios Panda de Buenos Aires y cuenta con la producción de Ricardo Mollo.

El proceso de creación del disco fue largo, unos seis meses que los tuvo juntos en una quinta en la localidad de Paso del Rey. Durante ese proceso pasaron varias cosas, como  la partida del baterista Daniel Buira por problemas internos y la consolidación de su convocatoria, ya que hicieron siete conciertos al hilo en el Estadio Obras. También  fueron y vinieron varias veces en la búsqueda de un sonido satisfactorio.

Alfredo Toth, uno de los productores de «Tercer Arco», fue uno de los primeros en acercarse a trabajar con la banda en ese proceso: «Entre abril y mayo, me reuní primero con Andrés y después con el resto de la banda. Ahí les recomendé a un técnico de sonido (Richard Troilo, que hizo algunos trabajos conmigo) con el que terminaron trabajando».

Cuando ingresan a los estudios Panda a grabar, en agosto de ese año 2000, se suma Ricardo Mollo: “Lo que hice fue resaltar más las guitarras, que en este disco van estar más al frente y para lo cual se volvió grabar gran parte de lo hecho. Es que sabían lo que querían pero no estaban tan seguros de como lograrlo”.

«Ruleta», “Globalización”, “Vine hasta aquí”, “María y José”, “Luz de marfil”, “Media caña” y «Fijate», son algunas de las 14 canciones que integran el disco que fue mezclado en un estudio de Los Ángeles, Estados Unidos.

La presentación fue  en el estadio de Atlanta, el 16 de diciembre. La gira continuo recorriendo varios puntos del país como Villa Gesell, Mar del Plata, La Plata, Mendoza, Cordoba, Santa Fe, Jujuy, Salta, para finalizar en Buenos Aires.

Primero repitieron el Estadio de Atlanta, el 20 de octubre del 2001, pero tuvieron que reprogramar una segunda fecha, por una denuncia de los vecinos de Villa Crespo por ruidos molestos.

El 24 de noviembre se presentaron antes 35 mil personas en el Estadio de Huracán y las palabras de Ciro ese día fueron:

«Nos quisieron cagar la fiesta, pero a 30.000 personas no se les caga la fiesta. Ahora lo quieren meter preso por haber habilitado geriátricos truchos al mismo que nos cagó la fiesta. Lo bueno de que nos la haya cagado, es que hoy estamos de fiesta».